Aprovecho este espacio web en el que participo para hablar de un tema de actualidad, como es el trabajo, que desde hace bastante tiempo va ligado con la palabra crisis, una palabra que ya cansa, incluso pesa demasiado para la inmensa mayoría de los españoles.
Las actitudes han cambiado respecto al significado de trabajo. Antes se trabajaba no sólo por disponer de los necesarios ingresos familiares, sino que se hacía el trabajo con la satisfacción de que uno estaba aportando algo útil a la sociedad. De algún modo era una satisfacción el hecho de saber que con su trabajo estaba aportando su grano de arena para contribuir en la creación de un país mejor para todos.
Ahora bien , este concepto de trabajar por y para todos ha cambiado en el periodo actual. Lo que ha ocurrido es que ahora son demasiado los problemas personales que tiene cada individuo, de modo que bastante tiene con lo de sí mismo, como para encima tener que preocuparse por los demás.
Por tanto, se ha dejado de trabajar con el entusiasmo de tiempos anteriores. Ahora la gente va a su trabajo, hace lo que tiene que hacer (en algunos casos ni eso) y se va para casa. Ya no hay un compromiso por mejorar y hacer bien las cosas para que otros pueden estar mejor.
Ahora rige el individualismo egoista que en cierto modo ha resurgido del interior del individuo en donde estaba anidado.
Recordemos lo siguiente, y es que el ser humano es egoísta por naturaleza. Recordemos la frase: “En la vida lo más importante y lo que más quieres es tu vida, todo lo demás es secundario.” J.Fuentes
Es posible (es necesario) que algún día las cosas vuelvan a ser de algún modo como antes, en la que la gente vaya al trabajo no sólo para ganarse su sueldo, sino también para mostrarse competente y capaz de responsabilizarse frente a otros individuos que de alguna manera dependen del trabajo que está haciendo.