El radicalismo en ciertos medios de comunicación es algo que, desgraciadamente, está presente hoy día. No voy mencionar los periódicos o canales de TV que hacen del radicalismo su baza principal como bastión para la venta de anuncios, al fin y al cabo es lo que se pretende, vender publicidad y ganar ingresos con ello, como cualquier otro medio de comunicación.
De todos modo no podemos olvidar que estos medios de comunicación, también con claros destellos fascistas y xenófobos, no podría desarrollar su actividad si no fuera por la gente que lo sigue, por tanto, podemos concluir que hay un radicalismo extremos en España que se identifica con los comentarios de estos medios de comunicación.
Estos medios buscan polemizar para crear controversia y que así se habla cada vez más de ellos, por lo que consigue un mayor números de adeptos, personas que no tienen nada de criterio y que se dejan llevar por habladurías fascistas.
El conclusión podemos decir claramente que el radicalismo extremo no es lo adecuado para una sociedad progresista y moderna, es más representa un paso atrás por la lucha de las libertades y la tolerancia.
Algunos ejemplos de intolerancia en los medios
Tenemos varios ejemplos que hemos visto en los medios radicales, como por ejemplo la justificación para la NO utilización del preservativo en África, poniendo como razones que las manos de los africanos no son adecuadas para la manipulación de los preservativos, o que el bajo índice de alfabetización impide que el ciudadano africano pueda leer entender lo que dice el prospecto, y por tanto no sirve para ellos.
Indudablemente uno persona sensata no puede entender este tipo de periodismo tan radical basado en crear polémica para aumentar su popularidad. Pero como digo, únicamente se puede entender este tipo de declaraciones cuando se sitúa en un marco de incremento de ventas, no hay otro.