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Oferta de empleo

Hoy estoy especialmente contento puesto que he acudido a un oferta de empleo en la que estaba inscrito, y bueno pienso que la cosa ha ido bastante bien. No es que me hayan dado el trabajo todavía, pero me he visto con grandes posibilidades, no sólo por lo bien que ha ido la entrevista -al menos esa ha sido mi percepción- sino por el resto de aspirantes al mismo puesto de trabajo, que no es por menospreciarlos, pero ciertamente no he visto un gran nivel en ninguno de ellos.


Ha sido una entrevista un tanto inusual, puesto que que el entrevistador ha salido de su despacho y, encontrándonos todos los aspirantes en la sala de espera, el tipo a preguntado que quienes de los ahí presentes hablaba inglés. En ese momento he sido yo el único que ha asentido a este requerimiento, e inmediatamente me ha invitado a pasar dentro del despacho para comenzar la entrevista. Después de la entrevista, he salido y el gerente ha proseguido con otra persona al azar de las que quedaban en la sala.


Por tanto y como veis, me limito a contar una situación personal tal y como ha ocurrido, es decir, podéis tomarlo como un consejo el hecho de la importancia de hablar en inglés. Ya veis que de entrada, y a pesar de que no se solicitó el idioma como requisito para optar al empleo, parece que ha sido valorado en cierta manera. Por la parte que me toca, no podría llegar a pensar que este gesto del entrevistador supone una falta de respeto o una discriminación para el resto de los candidatos, pero lo que hay que tener claro es que todos estábamos dispuestos a aceptar trabaja en esta empresa, y por tanto tenemos que acatar las directrices que nos marcan desde el mismo momento de la entrevista.


Por mi experiencia laboral quiero aportar la importancia que supone el conocimiento de un idioma extranjero, especialmente el inglés, aunque otros idiomas como el alemán o el chino están en plena expansión. Mi consejo para la personas que actualmente se encuentran en situación de desempleo es que comiencen a aprender inglés en alguna academia, o incluso ir a otro país como Inglaterra y trabajar allí como camareros o cualquier otro oficio.


También quiero aportar algo más a esta experiencia, y es que el hecho de encontrar este empleo -espero que me lo den- no ha sido tarea sencilla.
He estado casi dos años sin trabajar, preparándome, realizando cursos orientados a mi especialidad, actualizando eventualmente mi hoja de currículum, y en definitiva continuar en mi búsqueda de empleo sin perder la esperanza. Pienso que la esperanza nunca de perderse en lo referente a la búsqueda de empleo, pero claro, a esta continua motivación hay que acompañarla de continuas dosis de acciones por parte de la persona que cada día ha de salir a la calle a buscar trabajo.


Si hay algo claro es que el trabajo no va a ir a llamar a la puerta del desempleado, es decir, el trabajo hay que salir fuera a buscarlo, visitar polígonos industriales y hacer el “reparto” de currículums desde las 9 de la mañana, y volviendo a casa a las 7 de la tarde si es necesario.
Aunque habitualmente siempre será mejor aprovechar las mañanas para presentar nuestra candidatura, puesto que por las mañanas es cuando suele estar la gente de contabilidad y recursos humanos, de modo que suelen trabajar a jornada partida en muchos casos.