El dni electrónico es sin lugar a dudas el mejor avance electrónico desarrollado hasta el momento en beneficio de los ciudadanos. Se pueden aceptar críticas con respecto a su eventual mal funcionamiento en alguna sede electrónica, o de la complejidad a la hora de proceder a su instalación o los problemas durante la misma, pero no cabe duda que la introducción del soporte digital supone una revolución en la que el ciudadano es el gran beneficiado.
El análisis es simple. El sistema de gestión y administración del dni necesita cambios para que el usuario mejores su experiencia, o en otra palabras, para que el uso del dni electrónico se extienda a nivel generalizado entre la sociedad es necesario que su implementación en los equipos informático sea mucho más sencilla.
Para entenderlo mejor -con un ejemplo- vamos a pensar en un usuario que adquiere un nuevo dispositivo para su ordenador, una WEBCAM.
El usuario tan solo se limita a conectar el dispositivo y el equipo lo reconoce e instala al momento. Esto es posible gracias al sistema PLUG-AND-PLAY del dispositivo.
Hay algunos lectores de dni electrónico que requieren de alguna acción extra por parte del usuario antes de su instalación, como solicitar la descarga del módulo criptográfico con el que podrá instalar el certificado raíz del dni-e, y es en este punto donde el usuario va a perderse durante la instalación.
Es necesario liberar al usuario de este lenguaje técnico para dar paso a una mayor simplicidad durante la instalación y uso del dni-e. Será en ese momento en que aumentarán los índices del uso del dni-e y el ciudadano entenderá mejor la gran ventaja que hasta el momento está descartando.