Si tienes buen criterio para distinguir entre un tipo de decoración óptima y una buena dirección de arte, tal vez el trabajo como decorador sea lo tuyo.
Puede ser decoración de interiores, arquitectura efímera, escaparatismo, stands, atrezzo, y todo lo que englobe el mundo del diseño en general.
Para este trabajo ciertamente si que vas a necesitar un mayor nivel de formación, necesitarás algunos conceptos básicos que seguramente podrás descubrir por internet.
Posiblemente, lo más complicado sea el comienzo, dado que si no has trabajado nunca en este sector, tal vez no tengas lo ás importante, y es tu guia de referencia de trabajos, o mejor dicho, portafolio de trabajo.
Un portafolio es lo que define a cualquier diseñador, decorador, y en definitiva, a cualquier trabajador de la industria del diseño.
Sin un portafolio de inicio te resultará complicada la tarea de captación de nuevos clientes, por lo que siempre te pedirán referencias en cuanto a trabajos realizados.
Habitualmente, quien se dedica como autónomo/freelance en el mundo de la decoración suelen ser personas que han trabajado con anterioridad para otras empresas y que posteriormente montaron su negocio propio.
Al igual que un fotógrafo, un decorador puede resultar igualmente arrogante,por tanto todo eso es lo que tienes que evitar y trabajar en tu conducta.
Es decir, pensar que no eres el centro del Universo y que todo lo que dices no siempre resulta válido.
Si sigues este consejo seguro que conservarás gran parte de clientes que en su día contrataron tus servicios atendiendo a tu humildad.